Na aldea de Chirlo Merlo, perto da casa da Sabeliña, vive a familia Fufú: o pai Fufo, a nai Fufa e o fillo, o Fufiño.
22 xaneiro 2021
Canción-conto da letra "f": o Fufiño e a súa familia
21 xaneiro 2021
Canción-conto do dígrafo "ll": o millo da Sabeliña
A Sabeliña ten unha leira de millo preto da súa casa. Nesta leira dáse moi ben o millo, e á Sabeliña encántalle escoitar o asubío que fan as follas do millo ao abanear co vento.
Pero estes días a Sabeliña anda algo inqueda porque sente ruxir algo entre o millo. Por moito que mira e mira, non sabe que causa ese ruxir... E o peor é que cada día desaparece unha mazaroca...
Quen é o pillabán que llo rouba?
Compositor: Fernando Fernández Picos20 xaneiro 2021
Canción-conto da letra "h": a Hipa dálle o hipo
O Chucho segue coas súas falcatruadas e a de hoxe foi moi gorda. Mentres a Chola e a Chipa lle estaban dando de comer ás pitas, achegouse silandeiro e colgouse do cesto da Chipa. Queríalle meter un susto e... meteullo ben gordo porque coa forza que fixo tiroulle o cesto ao chan. Á Chipa colleuna tan de súpeto que non podía falar. Quedou mudiña de todo con aquela impresión tan forte, e só podía dicir:
-Hip, hip, hip!
Quedará muda para sempre? Haberá que lle cambiar o nome?
19 xaneiro 2021
Canción-conto da letra "ñ": a Sabeliña e o lobo Ñañudo
O lobo Ñañudo é o máis velliño de todos os habitantes do bosque. Todos o respectan e é o animal máis sabio da aldea. O problema é que de tan velliño xa lle caeu toda a dentamia. Pásao fatal para se manter porque só pode imbar cousas brandiñas.
Os seus amigos do bosque non atopan cousas amolecidas para lle levar de comer. Quen se ocupa diso é a Sabeliña, que lle leva algo todos os días.
E... por que lle chamarán Ñañudo?18 xaneiro 2021
Canción-conto do dígrafo "ch": a Chola, a Chipa e o Chucho
-Chove, chove!
A Chola púxose a rifarlle ao Chucho, pero...
Compositor: Fernando Fernández Picos
17 xaneiro 2021
Canción-conto da letra "x": o Xulio, A Uxía e o Mixo
21 decembro 2020
Bo Nadal 2020!
22 xullo 2019
21 decembro 2018
21 decembro 2017
22 decembro 2016
18 febreiro 2015
Caderno Números 1
No ensino escolar os números quedan englobados na materia de matemáticas e en xeral non se lle dá un tratamento específico á aprendizaxe do trazado das cifras nin se busca unha motivación especial para afianzar o concepto.
Partindo da base de que os números son tamén símbolos para ler e escribir, Chirlo Merlo elaborou dous cadernos para a introdución ao concepto e ao trazado dos números, baseándose na motivación dos contos do libro de lectura.
Aquí ofrecemos o caderno Números 1:
20 decembro 2014
23 decembro 2013
04 decembro 2012
Entrevista a Francesco Tonucci con motivo da Lei Wert
21 abril 2012
Canción-conto das letras "b" e "v": Manoliño vai de pastor
A Manoliño góstalle moito ir ao monte co seu gando. As vacas lévaas ao prado e pácenlle elas soas, non ten que coidalas. Pero as ovellas e máis o burro, cando os leva ao monte a pacer, Manoliño fai de pastor. Pero o burro Trotón non tén acougo e...
02 marzo 2012
Como aprendeu a ler Tarzán?

Así aparece narrado nunha edición arxentina do libro:
"Había, entre otros volúmenes, una cartilla, varios libros infantiles de lecturas, unos cuantos llenos de ilustraciones y un gran diccionario. A todos les echó un vistazo, pero lo que más le encantaba eran las ilustraciones, aunque aquellos extraños "bichitos" que cubrían las páginas carentes de dibujos o grabados excitaban su curiosidad y le sumían en profundas cavilaciones.
"En cuclillas encima de la mesa de la cabaña construida por su padre -el terso, bronceado y desnudo cuerpecito inclinado sobre el libro que sostenía entre las fuertes y delgadas manos, caída la larga cabellera negra desde la bien formada cabeza, brillantes las inteligentes pupilas- Tarzán de los Monos, alevín de hombre primitivo, ofrecía una imagen llena de patetismo y promesas. Era como una alegoría de los primeros pasos a través de la negra noche de la ignorancia en busca de la luz del conocimiento.
"El rostro del niño se contraía en sus esfuerzos por aprender, porque, de una manera ambigua y nebulosa, Tarzán había captado parcialmente los principios de una idea destinada a ser la clave y la solución del desconcertante rompecabezas que constituían aquellos extraños "insectos".
"Tenía en las manos una cartilla abierta en una página ilustrada con un mono pequeño, muy parecido a él mismo, pero cubierto, a excepción de las manos y la cara, con unas extrañas pieles de colores, que eso imaginaba que debía de ser la ropa: la chaqueta y los pantalones de la figura. Al pie de ésta había cuatro "bichitos" de aquellos:
"NIÑO
"Otro detalle que comprobó: los tales "bichitos" eran relativamente pocos, es decir, que algunos también se repetían muchas veces, que en otras ocasiones aparecían solos, aunque lo más frecuente es que hubiera varios juntos.
"Fue pasando las páginas despacio, examinando las imágenes y los textos, a la búsqueda de una repetición de la secuencia niño. La encontró debajo de una ilustración que representaba otro pequeño mono acompañado de un extraño animal de cuatro patas, parecido a un chacal, aunque no lo era. Al pie de ese grabado, los "bichitos" se alineaban así:
"UN NIÑO Y UN PERRO
Fue adelantando así, despacio, muy despacio, porque era una tarea ardua y laboriosa la que se había impuesto sin darse cuenta -una tarea que a cualquiera de nosotros nos parecería imposible: la tarea de aprender a leer sin tener el menor conocimiento de las letras ni del lenguaje escrito, ni la más remota idea de que tales cosas existiesen.
"No lo consiguió en un día, ni en una semana, ni en un mes, ni en un año; pero poco a poco, muy lentamente, fue aprendiendo, a partir del instante en que barruntó las posibilidades que prometían aquellos "bichitos", de modo que, cuando andaba por los quince años, Tarzán conocía las diversas combinaciones de letras que acompañaban a cada una de las figuras representadas en la cartilla y un par de las de los libros ilustrados.
Por entonces sólo había podido hacerse una idea bastante nebulosa del significado y empleo de artículos, conjunciones, verbos, adverbios, pronombres y demás.
"Se entregó con tal entusiasmo y asiduidad al jueguecito de sacarle partido gráfico a aquel nuevo juguete que, al cabo de una semana, toda la superficie de la mesa era una masa de garabatos, rayas y círculos entrelazados, mientras la mina del lápiz se había gastado por completo. Así que cogió otro lapicero, aunque en esta ocasión con un objetivo concreto en el ánimo.
"Trataría de reproducir algunos de los bichitos que culebreaban en las páginas de los libros.
"Una labor difícil, ya que sostenía el lápiz agarrado con la mano cerrada, como si empuñase una daga por el mango, lo cual no contribuía a facilitarle la escritura y menos a posibilitar la legibilidad de los resultados.
"Sin embargo, perseveró afanosamente meses y meses, siempre que podía ir a la cabaña, hasta que, tras infinitas pruebas, descubrió el modo y la postura adecuada para dominar el lápiz y dirigirlo de forma que le resultase factible reproducir, aunque toscamente, las letras.
"Así se inició en la escritura.
"La exploración a través de los diversos libros de que disponía le convenció de que había descubierto todas las clases de bichitos que con más frecuencia se repetían en las distintas combinaciones, y no le costó gran cosa disponerlas en el orden adecuado, gracias a la insistencia con que repasó una y otra vez, el fascinante alfabeto ilustrado que figuraba en la cartilla.
"Su educación fue avanzando; pero los mayores hallazgos los efectuó en el inagotable almacén del gran diccionario ilustrado, porque allí aprendió más a través de las imágenes que del texto, incluso después de haber comprendido el significado de las letras-insectos.
"Cuando descubrió la disposición de las palabras según el orden alfabético, se dedicó con gran placer a buscar y localizar las combinaciones con las que se había familiarizado. Y las palabras que las sucedían, la definición de las mismas, le permitió adentrarse provechosamente en los laberintos del conocimiento.
"A los diecisiete años ya había aprendido a leer las sencillas palabras y frases del catón y comprendía perfectamente la verdadera y maravillosa finalidad de los bichitos.
"Ya no se avergonzaba su cuerpo desprovisto de pelo ni de sus facciones humanas, porque la razón ya le había informado de que pertenecía a una raza distinta a la de sus salvajes y peludos compañeros. Él era un HOMBRE, ellos eran MONOS, y los monos pequeños que se desplazaban por las alturas de la floresta eran MICOS.
"Sabía también que Sabor era una LEONA, Histah una SERPIENTE y Tantor un ELEFANTE. Y así aprendió a leer.
"A partir de entonces, sus progresos se aceleraron. [...]"
A que se trata dun texto terriblemente suxestivo?
A nós fascínanos a lóxica coa que Edgar Rice Burroughs constrúe a aprendizaxe, aínda que en realidade estea afastada da lóxica que hoxe aplicamos á aprendizaxe. E tamén esta frase romántica, cargada de fe e idealismo, propios do Século das Luces: "Era como unha alegoría dos primeiros pasos a través da negra noite da ignorancia na busca da luz do coñecemento".
11 xaneiro 2012
Canción-conto da letra "s": a pallasa Susi
Susi é unha pallasa que fai circo cos seus amigos: o oso, a osa, a raposa e o sapo. Cando lles fai este sinal:
-Sssssss...
Todos saltan ao son do seu tambor.
Susana axúdalle a Susi. Ela tamén quere ensinarlle á súa cadeliña, a Pitusa, unhas cantas onadas para levala a facer circo...
23 decembro 2011
Bo Nadal (que o merecemos ben)!
26 outubro 2011
Canción-conto de presentación da letra "d": O xigante Dedolo
O xigante Dedolo ten un dedo máxico: o dedo furabolos da man esquerda. É un dedo enorme, ninguén ten un dedo tan grande coma el. Por ter o dedo tan grande chámanlle así: Dedolo.